Adrià Moreno, Zinyak lider de los Zins, agosto de 2015
Estimados
terrícolas. Hace ya bastantes semanas que creé este blog, sin embargo no he
tenido la ocasión de publicar ninguna entrada después de haber escrito la de la
presentación del site, porque ciertos intrusos se colaron en
mi nave nodriza y me vi obligado a detenerlos y perseguirlos, hasta que los
malnacidos escaparan con un vehículo robado. Bien, había pensado en publicar
una recomendación personal de cuentos, relatos, poemas y novelas del género de
terror (en esa lista estaban, entre otros, Poe, Lovecraft, Arthur Machen,
Stephen King y Bram Stoker), pero aún necesita algunos arreglos y deberá ser
aplazada. Por ese motivo he decidido hacer mi propio ensayo sobre uno de los
mejores libros de la literatura colombiana, hispanoamericana y de la lengua
española en general; se trata nada más ni nada menos que la novela "Cien
años de soledad", de Gabriel García Márquez. ESTE ANÁLISIS CONTIENE NUMEROSOS SPOILERS. Quedáis
avisados. En fin, sin más preámbulos, aquí os dejo el ensayo y un par de árboles genealógicos para que os sea más cómodo identificar a los personajes.
INTRODUCCIÓN, CONTEXTO Y TEMAS
“Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel
Aureliano había de recordar aquella remota tarde en que su padre lo llevó a
conocer el hielo.”
Así empieza
una fantástica aventura literaria considerada por Pablo Neruda como el Quijote
de nuestro tiempo. Yo creo que esta frase es el equivalente contemporáneo al
mítico “En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero
acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en
astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor”.
Cien años de
soledad es una novela escrita en la ciudad de México por Gabriel García Márquez
entre 1955 y 1956, publicada por primera vez en 1967, en Buenos Aires. Es
considerada como una de las 100 mejores obras literarias en español de todos
los tiempos. Dicha novela, relatada por un narrador omnisciente, narra desde la
fundación de un pueblo ficticio llamado Macondo y la evolución de éste y sus
habitantes (en especial la familia Buendía) hasta la mágica desaparición
del ruinoso lugar. He deducido que los hechos de la novela transcurren
aproximadamente entre la segunda mitad del siglo XIX y la última mitad del
siglo XX. Los temas principales del libro son la familia, la tragedia, el
incesto, la guerra, el paso del tiempo y, naturalmente, la soledad. En esta
obra se combinan con mucha maestría situaciones reales con elementos
imaginarios y fantásticos (niños con cola de cerdo, personas que vuelven de la
muerte, gitanos que se transforman en víboras, chicas que ascienden en cuerpo y
alma al cielo, judíos medio-cabra...) por lo tanto forma parte del movimiento
literario llamado realismo mágico, muy popular en Hispanoamérica durante la
segunda mitad del siglo XX, del que Gabriel García Márquez era uno de los
máximos representantes.
Gabriel García Márquez nació el 6 de marzo de 1927 en Aracataca, Colombia, y murió el 17 de abril de 2014, en México.
En paz descanse, Gabo.
PERSONAJES
PRINCIPALES
La familia
Buendía surge a raíz de un incesto (el nacimiento de José Arcadio, hijo de José
Arcadio Buendía y Úrsula Iguarán) y cien años después de la primera unión entre
estos miembros de la misma familia otro incesto pondrá fin a la existencia de
los Buendía y al pueblo de Macondo (Aureliano, el retoño de Aureliano Babilonia
y Amaranta Úrsula).
Todos los
Buendía y muchos de los personajes con los que interactúan comparten ciertas
características: la soledad, la angustia y la resignación. Cada miembro de la
familia cae también en el olvido, y finalmente no queda nada de ellos ni de sus
hazañas.
En esta
categoría resumiré las características psicológicas y los trastornos mentales
de los personajes más relevantes de la novela, daré mi opinión personal sobre
algunos de ellos y resumiré detalladamente sus vidas.
CREADORES DE LA FAMILIA:
-José Arcadio
Buendía. Es el fundador del pueblo de Macondo y antepasado de todas las
generaciones de la familia Buendía que aparecen en la historia.
Cuando vivía en un lejano pueblo rural se casó con su prima
Úrsula, a pesar de que ella estaba llena de presagios respecto a su
descendencia porque creía que sí tenían hijos nacerían con cola de cerdo y su
familia sería desgraciada e infortunada. José Arcadio Buendía decidió respetar
a su mujer y no mantuvieron relaciones sexuales. Aproximadamente un año después
de la boda Buendía-Iguarán, un hombre llamado Prudencio Aguilar, tras perder
una pelea de gallos contra el marido de Úrsula, se burló de José Arcadio
Buendía y de su mujer acusando al hombre de impotente o cobarde, tras lo cual
José Arcadio Buendía asesinó a su enemigo atravesándole el vientre con una
lanza. Ése día José y Úrsula tuvieron sexo por primera vez, a riesgo de tener
hijos monstruosos. Atormentado por el fantasma de su víctima, José decidió
marchar del pueblo junto a su esposa y algunas otras personas. Tras un largo
viaje, por petición de Úrsula los exiliados se establecieron finalmente en un
páramo cercano a la ciénaga, donde se construiría la pequeña aldea de Macondo.
José Arcadio Buendía es al principio un buen líder, haciendo de Macondo
un pueblo próspero y feliz, donde durante muchos años ni siquiera la
Muerte se atreve a actuar. Es un hombre con grandes ambiciones científicas y
sociales. Después del nacimiento de Aureliano, empieza a delirar y a gastar
mucho dinero en cosas inútiles, pero afortunadamente vuelve a la realidad tras
un comentario de Úrsula y vuelve a ser un gran hombre influente y un buen
padre, llegando incluso a darle a Úrsula una hija más, Amaranta. Poco después
de que Aureliano marchara por primera vez a la guerra Jose Arcadio Buendía
vuelve a enloquecer, llegando incluso a ser un poco peligroso para los seres
humanos de su entorno, por lo que su familia decide atarlo a un castaño, donde
pasaría el resto de su vida (pudiendo conversar solamente con Remedios en
latín) hasta que su viejo enemigo viniera a hacer las paces con él antes
de que muera. Cuando muere llueven flores amarillas durante toda la noche.
Años después
del fallecimiento de José Arcadio Buendía, algunos miembros de la familia
pueden ver su espectro junto al árbol, y cuando un anciano Aureliano va a
orinar ahí, en ocasiones le salpica, ya que no es capaz de verlo.
-Úrsula
Iguarán. Esposa y prima de José Arcadio Buendía. Es la principal
responsable de la crianza de sus hijos biológicos y adoptivos y de algunos de
sus descendientes, además de encargarse del cuidado de la casa durante más de
cien años. Es en mi opinión la mujer más sensata y cuerda de la obra. Úrsula es
la matriarca de la familia; después del enloquecimiento de José Arcadio Buendía
ella tiene el máximo poder en su casa, hasta que la “reina” Fernanda ocupa su
lugar de dueña del hogar. Durante la guerra engorda mucho y antes del
nacimiento de José Arcadio (hijo de Aureliano II y Fernanda), al que se empeñó
en criar para que fuera Papa, se vuelve ciega pero se guía a través de los
demás sentidos y mediante el aprendizaje de las rutinas de los habitantes de la
casa. Sus familiares no descubren su ceguera, y cuando Úrsula no es capaz
de seguir orientándose a través de sus otros sentidos y empieza a estorbar,
creen que simplemente se ha vuelto muy torpe e inútil. Durante sus
últimos años Amaranta Úrsula y Aureliano Babilonia la usan como juguete y
conversan con ella fingiendo ser personas de muchos años atrás y mantiene
siempre el brazo levantado, sin volverlo a bajar nunca. Muere un poco después
de que termine el diluvio, tal como ella había previsto, pero muy poca gente
asiste a su discreto funeral porque la mayor parte de los supervivientes del
diluvio no se acuerdan de ella.
PRIMERA
GENERACIÓN
-José
Arcadio. Primer hijo de la estirpe de los Buendía. Es un hombre muy
alto, musculoso, varonil y mujeriego, pero su mayor rasgo es que es tremendamente impulsivo. Será el que continuará
la dinastía Buendía con su hijo Arcadio (nacido de una relación con
Pilar Ternera), que será criado por Úrsula. Cuando era un adolescente, tras
dejar embarazada a Pilar Ternera, José Arcadio huyó de Macondo con unos gitanos
y regresó muchos años más tarde, tras vivir numerosas aventuras y dar la vuelta
al mundo decenas de veces, enteramente tatuadas y grande como un armario. Cuando
se restablece en su ciudad de origen se casa con su hermana adoptiva
Rebeca, motivo por el cual ambos son repudiados por su madre. Muere de un
disparo en la casa que comparte con Rebeca por causas desconocidas. En mi
opinión probablemente el asesino fue un granjero vengativo, ya que José Arcadio
usurpó muchas tierras a los campesinos. Desde la muerte de José Arcadio su
esposa Rebeca se aísla del mundo y se encierra en su amargura y soledad.
-Coronel
Aureliano Buendía. Segundo primogénito de José Arcadio y Úrsula. Es un
personaje muy solitario y nostálgico, que ha sufrido mucho a lo largo de su
vida. Durante su infancia fue un chico muy interesado en la ciencia (gracias a
su padre), cuya principal afición fue la fabricación de pescaditos de oro, cosa
que siguió haciendo hasta el fin de sus días. Cuando era un adolescente, tuvo
un hijo con Pilar Ternera; Aureliano José. Estuvo enamorado de Remedios Moscote
cuando ésta era una niña, y se casó con ella cuando la chica llegó a la
pubertad. Desgraciadamente Remedios murió poco después de casarse con
Aureliano. Aureliano Buendía se hace amigo del conservador Apolinar Moscote y
ambos discuten sobre asuntos del gobierno mientras juegan al dominó.
Cuando
estalla la guerra civil en Colombia, Aureliano abandona Macondo junto a otros
jóvenes y valientes soldados (entre ellos su mejor amigo Gerineldo Márquez)
para luchar a favor del partido liberal contra los conservadores nacionalistas.
Antes de partir deja el gobierno de Macondo a manos de su sobrino Arcadio. Rápidamente
asciende a coronel por ser un gran estratega militar y sobrevive a muchas
batallas, envenenamientos, traiciones e incluso a un pelotón de fusilamiento a
lo largo de sus veinte años de actividad. Durante los largos conflictos bélicos
en los que participa, visita su pueblo natal en varias ocasiones en diferentes
condiciones, en una ocasión es condenado a muerte y casi es fusilado allí, pero
finalmente sus verdugos se ponen de su lado y vuelven a guerrear. Además
de Aureliano José, el coronel también fue el padre de otros 17 varones de 17
mujeres distintas.
Aureliano en
una ocasión casi hace voluntariamente que maten a su amigo Gerineldo por
contradecirle, pero finalmente le perdona la vida y escapan. En otra de sus
estancias en la comunidad donde nació, ordena fusilar al general Moncada (por
pertenecer al partido conservador, aunque fue en realidad el mejor gobernante
que tuvo Macondo) en contra de los deseos de Úrsula y de muchos habitantes
del pueblo, pero la voluntad de Aureliano se cumple y nadie puede evitar la
muerte del general. Cuando vuelve definitivamente al pueblo, tras firmar
la paz con el gobierno, decide dedicarse sólo a su negocio de orfebrería y a
hacer y deshacer pescaditos de oro. Una calle es nombrada como él en su honor.
Interviene en algunos sucesos y en un momento dado su orgullo le incita a
iniciar otra guerra, pero sus antiguos compañeros no le apoyan y vuelve a
seguir trabajando con los pescaditos, aunque deja de venderlos porque se entera
de que la gente los compraba como reliquias históricas y no como joyas. Muere
de vejez junto al viejo castaño un día en que el circo pasa por Macondo después
de evocar antiguos recuerdos de su niñez, de cuando visitaba a los gitanos con
su padre y su hermano. Años después de su muerte, la poca gente que queda en
Macondo niega su existencia y afirman que sólo era un personaje inventado por
el gobierno con la excusa de matar liberales.
Es el
personaje que más me gusta de la novela, y creo que es uno de los más
interesantes porque tiene una personalidad compleja; a pesar de ser uno de los
hombres más activos durante la guerra en realidad es un gran farsante. Él no
luchó por el partido liberal, sino por mero orgullo y soberbia, pero eso
hace que el suyo sea uno de los personajes más elaborados y reales del libro.
-Amaranta
Buendía. Es la hija menor de José Arcadio Buendía y Úrsula Iguarán.
Desde su adultez lleva una venda negra en la mano para presumir de su eterna
virginidad. Es una experta en las artes de los rituales mortuorios. Fue
una chica muy alegre y risueña durante su infancia, amiga y compañera de juegos
de su hermana adoptiva Rebeca, pero su actitud comenzó a cambiar cuando ambas
se enamoraron de Pietro Crespi, el músico italiano encargado de tocar la
pianola y maestro de baile de las muchachas. Pietro Crespi y Rebeca se enamoran
y se comprometen, cosa que causará un malsano odio de Amaranta hacia su hermana
y hará todo lo posible por evitar el matrimonio, llegando incluso a intentar
asesinar a Rebeca en varias ocasiones. Cuando Rebeca se cansa de esperar su
boda con Crespi y huye con José Arcadio, Amaranta rechaza al italiano (que se
enamoró de ella después de que ambos fortalecieran su amistad) y éste se
suicida cortándose las muñecas. Desde entonces Amaranta se vuelve una mujer muy
solitaria y tiene un comportamiento muy cruel respecto a los hombres. Mantiene
breves y ligeras relaciones incestuosas con su sobrino Aureliano José y más
adelante es demasiado cariñosa con José Arcadio (el hijo de Aureliano Segundo y
Fernanda del Caprio). Sigue ayudando a su madre en la casa durante mucho
tiempo. En los últimos años de su vida teje calmadamente su mortaja, haciendo y
deshaciendo (algo similar al ciclo del coronel con los pescaditos de oro),
sabiendo que cuando la terminará tendrá que morirse, como acaba
sucediendo. Al principio intenta tardar tanto como sea posible para aplazar su
muerte e intentar que se cumpla su único deseo: vivir más que Rebeca, pero
termina siendo ella la primera hermana en morir. El día en que terminó la
mortaja aprovechó para despedirse de algunos miembros de la familia y obligar a
su madre a anunciar públicamente que murió como vino al mundo; virgen.
-Rebeca.
Rebeca es uno de mis personajes femeninos favoritos de la novela. Llega a
Macondo siendo una niña pequeña tras la muerte de sus padres, llevando sus
huesos consigo. Es pariente de Úrsula, aunque la mujer no logra recordar
a los padres de ella, así que decide adoptarla y criarla como una hija más. La
niña trajo también a Macondo la peste del insomnio y el olvido (que duró
algunos meses), y además tenía unas costumbres muy extrañas, como comer tierra
y lamer la cal de las paredes, además de chuparse el dedo constantemente.
Después de que Úrsula le erradicara temporalmente esas costumbres llega a ser
una adolescente preciosa y pronto se compromete con Pietro Crespi, soportando
las artimañas de su hermana. Después de muchos encuentros románticos con el
músico y de que el matrimonio con éste haya sido pospuesto numerosas veces, el
hermano adoptivo de Rebeca José Arcadio regresa a Macondo y se enamoran. Los
hermanos se casan y son un matrimonio feliz hasta el asesinato de él, que
provocará el hermetismo y aislamiento de Rebeca hasta su propia muerte. Rebeca
se vuelve un ser desagradable y rencoroso y su familia pronto se olvida
de ella. La comedora de tierra solo se comunica con su criada. Úrsula se
arrepiente muy tarde de lo cruel que fue con Rebeca, sabiendo que ya no hay
vuelta atrás y no es posible una reconciliación. Muere un par de años después
que Amaranta y la única que asiste a su funeral es su vieja criada.
-Remedios
Moscote. Esposa del coronel Aureliano, hija de don Apolinar Moscote. Aureliano Buendía se enamoró de la más pequeña de las hermanas Moscote cuando ella tan sólo tenía nueve años y aún era impúber.
Cuando la chica cumple los doce años y menstrua por primera vez, por fin está
preparada para casarse con Aureliano. La boda de ambos es muy alegre y todo
Macondo la presencia y se encariña con ella. Remedios es una niña alegre y
colaboradora, y pronto se hace cargo del cuidado y la crianza del hijo
que su marido Aureliano había tenido con Pilar Ternera y de cuidar a José
Arcadio Buendía, que seguía atado bajo el castaño. Pero, tras un corto plazo de
tiempo, Remedios queda embarazada de mellizos y muere " envenenada por su
propia sangre" mucho antes de dar a luz a sus hijos. Su marido no llora
tanto su pérdida como era de esperar, porque por entonces ya empieza a planear
ir a la guerra.
SEGUNDA
GENERACIÓN
-Arcadio. Es el hijo de José Arcadio y Pilar
Ternera, aunque él no lo sabe y es criado por Úrsula. Es solitario como su tío.
Intenta tener relaciones sexuales con Pilar, pero ésta paga a una chica llamada
Santa Sofía de la Piedad para que la sustituya y así no tener que practicar el
incesto. De la relación de Arcadio con Santa Sofía de la Piedad nacen Remedios
la bella y los gemelos Aureliano Segundo y José Arcadio Segundo. Cuando
Aureliano marcha de Macondo para guerrear, deja el gobierno del pueblo a cargo
de él, pero muy pronto Arcadio se transforma en un cruel dictador, llegando a
matar a los que le contradicen o se ríen de él, atacar a los religiosos y a
punto estuvo de asesinar a don Apolinar Moscote (el padre de Remedios) y
vapulear a sus hijas. Afortunadamente su dictadura termina después de 11 meses
cuando su madre lo regaña y ridiculiza públicamente. Más adelante es fusilado
por Roque Carnicero cuando el pueblo es tomado por los conservadores. Sus
últimas palabras son: “¡Cabrones! ¡Viva el partido liberal!”
El
temperamento de este hombre durante su mandato está marcado por el abandono y
la humillación que padeció durante su infancia. Sus familiares no le
hacían mucho caso, en la escuela y en la calle muchos se burlaban de sus muslos
de mujer y el único que se preocupó realmente por su educación fue Melquíades
cuando aún vivía.
-Aureliano
José. Es el hijo de Aureliano y de… ¡adivinen quién! ¡Correcto, de Pilar
Ternera! Fue criado por Úrsula y Amaranta, pero durante su adolescencia se
enamora de la segunda y mantiene un pequeño amorío con ella, por lo que al
final es echado de casa por su tía y decide acompañar a su padre en algunas
guerras. Regresa a Macondo siendo un hombre corpulento en busca de su tía y es
rechazado de nuevo por ella. Estaba destinado a tener un matrimonio próspero y
feliz junto a una muchacha que ansiaba conocerle pero muere de un disparo que
según las cartas mágicas de Ternera no debería haber sucedido, y que cambió su
destino.
-17
Aurelianos. Son los hijos que tuvo el coronel con 17 mujeres distintas
durante las numerosas guerras en las que participó. Todos ellos reciben el
nombre de su padre y el apellido de sus respectivas madres. Después de que
fuera firmado el tratado de Neerlandia, que puso fin a la larga lucha entre
liberales y conservadores, todos emprenden la búsqueda de su padre. Cuando
llegan a Macondo causan mucho alboroto, pero el coronel y otros miembros de la
familia se divierten con ellos y algunos se quedan a vivir. Un mal día Úrsula
decide llevarlos a la iglesia aprovechando que es miércoles de ceniza y los 17
Aurelianos son marcados con una cruz de ceniza indeleble, completamente imborrable,
en la frente, cosa que hace que se les identifique fácilmente como hijos del
antiguo rebelde y que más adelante provocará el asesinato de todos ellos
(probablemente fue una venganza del gobierno tras la reciente ofensa del
anciano Aureliano al negarse a recibir a sus representantes como invitados en
Macondo). Aureliano Amador logra escapar de la masacre de sus hermanos durante
muchos años, pero cuando más tarde regresa pidiendo auxilio, en los tiempos en
que la casa es ocupada por José Arcadio y Aureliano Babilonia, el
ermitaño y su tío se niegan pensando que era un simple vagabundo, y dos
policías le disparan en el centro de la cruz. Una vez muertos tanto Aureliano
José como los 17 bastardos, termina definitivamente la descendencia de Aureliano
Buendía.
-Santa
Sofía de la Piedad. Es la mujer de Arcadio que contrató Pilar Ternera
durante la juventud del dictador para que le diera amor. Es una mujer calmada y
sumisa que apenas se atreve a dar órdenes a sus propios hijos, aunque a veces
manda en la cocina. Tras la muerte de Arcadio se va vivir a la casa de los
Buendía, donde los habitantes no le harán mucho caso, a pesar de que participe
mucho en el mantenimiento de la casa, y ella nunca se queja de nada. Es más
tratada por sus hijos como una sirvienta que como una madre. Al morir, José
Arcadio Segundo le pide a su madre que degolle su cadáver para asegurarse de no
ser enterrado vivo. Cuando ya es vieja Sofía se marcha de Macondo
pensando que ya ha trabajado mucho, y nadie vuelve a saber nada más de ella.
TERCERA
GENERACIÓN
-Remedios
la bella. Esta chica de otro mundo es hija de Arcadio y Sofía. Su belleza y
su olor exhala suspiros de todos cuanto la ven, pero los que tienen la fortuna
de contemplar su espectacular rostro o su magnífico cuerpo durante mucho rato y
la desean, mueren. Se han dado más de 4 casos de muertes provocadas por su
aspecto extraterrenal. Suele andar desnuda o con un camisón por la casa, aunque
Úrsula le tiene que obligar a vestirse con mucha ropa cuando sale o
cuando hay visitantes en la casa por razones obvias. Ella es inmune a todo tipo
de sentimientos; desconoce el amor, la depresión, la empatía, el odio, la
vergüenza… Nada le importa mucho, ni siquiera su aspecto, y considera que todos
los hombres son unos simples, aunque tampoco muestra desdén hacia ellos. Un día
desaparece ascendiendo al cielo de manera mística llevándose unas sábanas con
ella, hecho del que fue testimonio Amaranta y que indignó a Fernanda.
Me resultó
muy divertido un capítulo en que un forastero la observaba desde un agujero en
el tejado del baño anonadado mientras ella se estaba aseando. Cuando ella le
ve, ni siquiera siente vergüenza, sigue con lo que estaba haciendo y
simplemente advierte al hombre de que el tejado se va a caer y se matará,
inocente respecto al propósito por el que seguía ahí arriba observando. El
hombre se resiste a sus impulsos primarios, pero le pide bobamente matrimonio,
creyendo que la chica le estaba seduciendo, pero, tal como ella se imaginó, un
trozo del techo se desmorona y él se abre la cabeza y muere.
-Aureliano
Segundo. Hijo de Arcadio y Santa
Sofía de la Piedad, gemelo de José Arcadio II. Es el padre de
José Arcadio, Renata Remedios y Amaranta Úrsula. Hasta la adolescencia es idéntico a su gemelo y ambos hacen
todas las cosas de manera sincronizada. Más tarde se cree que en el momento de
nacer, las cunas de Aureliano II y José Arcadio II fueron intercambiadas,
porque cuando crece tiene las características de los José Arcadio (alocado,
aventurero y directo) mientras que su hermano se muestra generalmente calmado y
paciente, rasgos comunes en los Aurelianos. Es un hombre emprendedor, pero alegre y juerguista, y algo mujeriego.
Durante su adolescencia conoce a Petra Cotes y ambos se hacen amantes, aunque
los dos gemelos la compartían porque Petra pensaba que eran la misma persona.
Cuando crecen, José Arcadio deja de interesarse por la mujer, pero Aureliano
mantiene su relación con ella (mágicamente cuando está con ella sus animales de
granja se reproducen mucho y tienen mejor sabor) hasta que ve a Fernanda del
Caprio en el sangriento carnaval y más tarde se lanza a su búsqueda. Cuando la
encuentra, en un reino desolado y en ruinas, pide su mano y posteriormente se
casan en Macondo. Al poco tiempo, Aureliano Segundo retoma su relación con
Petra Cotes porque Fernanda no quiere acostarse con su esposo. Cuando esta
descubre la infidelidad, está a punto de abandonar el pueblo, pero perdona a
Aureliano después de que le suplicara el perdón. Más adelante Petra Cotes
vuelve a ser su amante, pero Fernanda decide ignorar la situación. Aureliano
recibe con entusiasmo a sus tíos (los 17 Aurelianos) y a todos los demás
extranjeros que se hospedan en su casa durante el tiempo en que Macondo es un
lugar turístico. Al cabo de un tiempo vuelve a vivir con su amante, aunque
sigue casado con Fernanda, y allí es más feliz. Estando con Petra Cotes su
fortuna crece hasta la época del diluvio. Cuando está a punto de
sufrir un ataque cardíaco por comer en exceso en un concurso contra “La Elefanta”,
decide volver con su esposa y pasa más tiempo en casa de ella que de Petra
Cotes. Es una buena figura paternal para su hija Renata, y nunca aprueba su
destierro, y más adelante, durante las eternas lluvias, se ocupa también de la
crianza de Amaranta Úrsula y Aureliano Babilonia poco después de que el chico
fuera descubierto. Tras el fin del diluvio, Macondo ya empieza a ser un
lugar desolado y pobre y Aureliano II pasará los últimos años de su vida
vendiendo rifas de animales junto a Petra Cotes para poder mantener a su
familia. Se dedica desesperadamente a buscar el tesoro que escondió Úrsula en
la época de las guerras para pagar a Amaranta Úrsula un viaje a Bruselas, pero
nunca lo encuentra y finalmente consigue el dinero necesario vendiendo algunas
tierras maltratadas por la lluvia. Muere en la cama, al mismo tiempo que su
gemelo José Arcadio.
-José
Arcadio Segundo. Hijo de Arcadio y Santa Sofía de la Piedad, gemelo de Aureliano II.
Al llegar a la adolescencia José Arcadio II tiene
las características de los Aurelianos de la familia, más calmados y
reflexivos, y en cierto momento se observa que también puede ser rebelde como
fue el coronel. Cuando era un crio pidió a Gerineldo Márquez que le llevara a
ver un fusilamiento. Tras el acontecimiento se dio cuenta de que a veces los
soldados entierran vivos a los condenados porque no se molestan en mirar si
están realmente muertos, y desde entonces su mayor temor es ser sepultado en
vida. Fue él quien conoció a Petra Cotes y se convirtió en su amante cuando era
joven antes de compartirla con su hermano y de dejársela a él más adelante.
También fue el responsable de traer a Macondo a las elegantes prostitutas
francesas a bordo de lo que quedaba del galeón descubierto muchos años atrás
por José Arcadio Buendía y de la expansión del río de la ciudad. El episodio
más importante de su vida es la participación en la huelga de los trabajadores
de las bananeras, huelga que terminará en una horrenda masacre
ignorada y repudiada por todo el mundo, en la que mueren unas 3000 personas
(hombres, mujeres y niños). Él logra sobrevivir y se retirará en el cuarto
donde trabajaba el coronel, dedicándose, como ya hizo su hermano
tiempo atrás, al estudio de los manuscritos de Melquiades, sin conseguir
averiguar nada. Muere al mismo tiempo que su hermano gemelo y los cuerpos de
los dos son intercambiados de nuevo en las tumbas. Antes de morir pidió a su
madre que degollara su cadáver para no morir enterrado vivo.
Sus últimas
palabras, dirigidas a Aureliano Babilonia son: -Acuérdate siempre de que eran
más de tres mil y que los echaron al mar.
-Fernanda
del Caprio. Esposa de Aureliano Segundo. Es una mujer muy religiosa de
costumbres educadas y refinadas, y fría de carácter, por lo que contrasta mucho
con su peculiar familia. Llega por casualidad a Macondo en carnaval, y es
nombrada como la mujer más bella del mundo. Cuando Aureliano Segundo la ve por
primera vez, se enamora de ella y después de que ella regresara a su ciudad
natal la va a buscar para pedirle matrimonio. Poco después de la boda está a
punto de abandonar a Aureliano pero finalmente regresa junto a él y permite que
siga viéndose con su amante. Es muy estricta con sus hijos, al contrario que su
marido y es detestada por casi todos sus familiares. Es la responsable del
trágico suceso que dejó inválido a Mauricio Babilonia. Poco después decide
desterrar a su hija Meme enviándola con las monjas y cuando
le entregan a su nieto, lo criará sin amor y de escondidas hasta los
cuatro años, momento en el que será descubierto por los demás y pasará a ser
más o menos otro miembro de la familia. Fernanda prohíbe que salga a la calle y
que asista a cualquier lugar público por su condición de hijo bastardo de
Meme, pero oculta a los demás su origen diciendo que se lo encontró abandonado
en una cesta. Durante gran parte de su vida Fernanda es atendida por unos
médicos imaginarios, pero luego ella empieza a temerlos pensando que le
desordenan y sabotean las cosas de la casa. En el transcurso de los últimos
días de su vida, Aureliano Segundo vuelve a mudarse con ella para morir junto a
su esposa. Ella no vivirá muchos años más. Fernanda muere vestida de reina,
cuando ella y su nieto Aureliano son los únicos que residen en la casa.
CUARTA
GENERACIÓN
-José
Arcadio. Hijo de Fernanda del Caprio y Aureliano Segundo. Es criado desde
que nació para ser Papá, a raíz de una broma, y a los pocos años es enviado a
Roma para poder aprender su “oficio”. Pero cuando llega a la ciudad italiana
huye y se dedica a otras cosas, engañando a su madre en las cartas que se
enviaban mutuamente. Aun así no miente cuando dice que ve al Papa, porque en
una ocasión presencia uno de sus discursos. Cuando es adulto regresa a
Macondo después de la muerte de su madre, y se vuelve el dueño de la casa. Al
principio es casi desagradable con su sobrino, pero poco a poco va simpatizando
con él y hasta le deja salir de casa, aunque cuando Aureliano ya ha obtenido
los misteriosos libros del Sabio Catalán no siente interés por salir. Se conoce
que José Arcadio piensa constantemente en Amaranta, incluso cuando practica
juegos sexuales con niños y comete otras depravaciones. Cuando descubre el tesoro que
Úrsula había escondido bajo su cama en la época de las
guerras, empieza a derrocharlo con sus jóvenes amigos en fiestas, antes de a
emplearlo para regresar a Italia, pero algunos de estos muchachos codiciosos le
matan muy profesionalmente y le roban el oro. Aureliano será entonces el único
habitante de la casa hasta que vuelve su tía con su marido.
-Renata
Remedios (Meme). Su padre es Aureliano Segundo. Su madre, Fernanda del
Caprio, quería llamarla Renata para rendir homenaje a la abuela materna de la
niña, y su tatarabuela Úrsula quería llamarla Remedios en honor a la niña
Moscotes, pero finalmente se decidió llamarla Rennata Remedios, aunque casi
todo el mundo acabó por llamarla Meme (diminutivo de Remedios). De pequeña
acude a una escuela de monjas por petición de Fernanda y Úrsula y ahí se
convierte en una chica muy sociable. Se hace amiga de Patricia Brown y otras
chicas norteamericanas y es invitada en todos lados para tocar su instrumento.
Desde pequeña tiene una relación muy buena con su padre, con el que realiza
muchas actividades, como ir al cine, pero su relación con su madre es más bien
incómoda y la detesta un poco. Un día conoce al joven aprendiz de mecánico y
obrero de la compañía bananera Mauricio Babilonia y al cabo de un par de meses
ya están saliendo de escondidas. Su buena relación con su padre se va
debilitando un poco pero este decide reservarse sus sospechas y no contárselas
a su mujer, pero su madre ya intuye algo y termina por pillarlos enrollándose
en el cine. La fría mujer no lo aprueba y encierra a su hija en su habitación.
Meme consigue encontrarse muchas veces por la noche con su novio en el baño de
su casa (él entraba levantando las tejas). Su madre se da cuenta y pide al
alcalde que ponga algunos guardianes detrás de la casa, por donde entraba
Mauricio, con el pretexto de que sospechaba que alguien le robaba las gallinas,
y cuando sorprenden al joven subiendo el tejado le disparan en la columna
vertebral dejándolo inválido durante el resto de su vida y considerado un
simple ladrón de gallinas. Poco después Meme es obligada a ingresar en un
convento, donde permanecerá por el resto de su
vida, sin volver a hablar en signo de rebelión. Las monjas no saben que
está embarazada, por lo tanto, cuando nace Aureliano Babilonia las monjas
entregan el niño a la abuela Fernanda que lo criará en la casa de Macondo a
escondidas durante cuatro años hasta que es descubierto por sus familiares.
-Amaranta
Úrsula. Tercera hija de Aureliano Segundo y Fernanda del Caprio. Durante su
infancia es una chiquilla un poco sádica, porque disfruta torturando a los
insectos y a los animales junto su sobrino. Cuando sale el sol en Macondo y la
lluvia que duró tres años se detiene, es ingresada en una escuela privada. Al
graduarse en la escuela, su padre hace todo lo posible por pagarle un viaje a
Bruselas donde pueda terminar los estudios. Allí se convierte en una mujer muy
moderna, extrovertida y elegante. Conoce a un hombre excéntrico llamado Gastón
y después de casarse disfrutan haciendo todo tipo de cosas en pareja. Deciden
pasar unas vacaciones en Macondo, donde conviven con Aureliano Babilonia, pero
finalmente terminan por quedarse viviendo allí. Tres años después Gastón se
harta del maldito lugar en ruinas y poco después de que Amaranta Úrsula se
enamorara de su sobrino en secreto (y sin saber que era su sobrino), él regresa
a Europa por asuntos de trabajo. Más tarde
Amaranta le comunica a Gastón su decisión de vivir y casarse con Aureliano,
cosa que Gastón acepta bien, augurándoles felicidad. Amaranta Úrsula
y Aureliano son muy felices en el desolado pueblo y se pasan todo el día
retozando y teniendo sexo sin importarles el estado de la casa y del
pueblo. Durante un tiempo ambos empiezan a tener miedo porque creen
que son hermanos y que Aureliano es hijo de Petra Cotes y Aureliano Segundo,
pero finalmente deciden fingir creer la teoría expuesta por Fernanda del
Caprio. Amaranta muere poco después del parto del niño con cola de cerdo nacido
del incesto.
QUINTA GENERACIÓN
-Aureliano
Babilonia. Hijo de Renata Remedios y
Mauricio Babilonia. Es criado por la abuela Fernanda y más adelante también por
Aureliano Segundo, pero casi a escondidas. Cuando es un niño y las
lluvias torrenciales caen tres años seguidos él se entretiene a jugar con
Amaranta Úrsula. Hasta su adultez siempre se mantiene encerrado en la casa, en
el viejo taller de orfebrería del coronel, donde estudia largamente
los manuscritos de Melquiades escritos en sánscrito y se dedica a leer todo
tipo de libros y enciclopedias. Después de la muerte de su abuela, al quedarse
completamente solo, empieza a salir y frecuenta algunos lugares olvidados de
Macondo. Se enamora de su tía Amaranta Ursula cuando ésta se muda a
Macondo con su marido y él se dedica a conocer a otras personas (el Sabio
Catalán, la negra Nigromanta, cuatro muchachos cultos y Pilar Ternera) para no
pensar en ella ya que es una mujer casada,. Cuando se da cuenta de que el
sentimiento de amor hacia su tía es correspondido, mantiene una relación
apasionada con ella y después de meses amándose, la deja preñada, pero el
nacimiento del hijo con cola de cerdo provoca la muerte de su amada y decide
abandonarle en una cesta en un río tal y como le contó su abuela que lo
encontró a él. Antes de llevarle al río, se descuida y lo deja solo en la casa,
pero cuando regresa ve que las hormigas se están llevando las pieles del
cadáver devorado del hijo y es entonces cuando entiende todo lo que está
escrito en los papeles de Melquiades. Se encierra en el taller para volver a
leerlos, horrorizado, mientras el viento empieza a destruir y azotar todo
Macondo y culmina con la extinción de la estirpe de los Buendía y de los
poquísimos habitantes restantes, tal como estaba escrito. La
frase más impactante y recordada de la profecía decía: El primero de
la estirpe está amarrado en un árbol y al último se lo están comiendo las
hormigas. Se desconoce si los Buendía
supervivientes (como Meme) que se hallaban en otros lugares también perecieron.
SEXTA
GENERACIÓN
-Aureliano
con cola de cerdo. Es el
último retoño de los Buendía, nacido de la relación entre Amaranta Úrsula y
Aureliano Babilonia. Involuntariamente su nacimiento pone fin a Macondo y a sus
pocos habitantes. Tiene una cola de cerdo, pero éso parece no importar a sus
padres cuando ambos viven. Su madre muere unas horas después de que él nazca y
Aureliano decide abandonarlo dentro de una cesta en el río del pueblo. Sin
embargo, olvida la cesta en casa y cuando vuelve el pequeño Aureliano con cola
de cerdo está siendo devorado y transportado por una colonia de hormigas antes
de que el pueblo quedara completamente pulverizado por la erosión del
espeluznante viento.
OTROS PERSONAJES IMPORTANTES
-Melquíades.
Es un mercader gitano bohemio e inventor extremadamente sabio, y un amigo fiel
de la familia Buendía. Siempre lleva un sombrero negro de alas de cuervo. Fue
durante muchos años un visitante habitual del pueblo junto a su compañía de
gitanos y titiriteros, pero él y sus compañeros desaparecieron en uno de sus
viajes por territorios extraños y no se los volvió a ver en Macondo. Más tarde
se sabe que murió, pero Melquíades vuelve de la muerte antes del inicio de la
locura de José Arcadio Buendía y se establece hasta su segunda muerte en la
casa de éste. Al principio Melquíades ayuda a los Buendía y educa a
algunos de ellos, pero cuando envejece se dedica a escribir en pergaminos cosas
extrañas en un idioma desconocido por los demás (sánscrito); esos escritos son
las profecías que determinan el destino de la familia y en los cuales se narran
todos los acontecimientos de Macondo desde la creación del pueblo hasta su
destrucción pasando por los mejores y los peores momentos del lugar y de sus
infortunados habitantes. Antes de morir pide a su antiguo amigo y al segundo
hijo de éste que quemen mercurio en su habitación durante tres días para poder
conservar su alma. Muchos años después, el fantasma de Melquíades mantiene en
su propia habitación largas conversaciones con el joven Aureliano Segundo hasta
que el chico madura y, después de la masacre de la compañía bananera el gitano
habla con José Arcadio Segundo hasta que el espectro termina por desaparecer
completamente.
Es uno de mis personajes favoritos a causa del halo de misterio que le rodea, su inteligencia, sus maravillosos o inútiles inventos y por la magia de sus pergaminos.
-Pilar
Tenera. Es una
adivina y espiritualista, y más tarde regenta de un burdel, que llegó al
lugar en el que se construiría Macondo junto a José Arcadio Buendía y Úrsula
Iguarán, entre otros. Cuando era joven su risa asustaba a las palomas y a los
niños, pero esa misma risa atraía a muchos hombres a su lecho durante sus
mejores años. Ha fornicado con muchos más hombres que Cersei Lannister en
Festín de Cuervos. El primer Buendía en darle un hijo (llamado Arcadio) fue
José Arcadio, que se marchó cuando se dio cuenta de que ella estaba embarazada,
y próximamente Aureliano, antes de conocer a la pequeña Remedios, también la embarazó
de José Aureliano. También es la responsable de emparejar a muchas personas y
permite que su casa albergue todo tipo de enamorados y amantes. Antes de que
Aureliano marche a guerrear engorda mucho y empieza a ser un poco vieja, pero
los hombres siguen visitándola y también muchas personas le piden que les lean
las cartas del destino. Otros Buendía que interactúan con ella a lo largo de la
novela son Rebeca, Amaranta, Arcadio (que a pesar de ser su hijo un día está
casi a punto de violarla pero que finalmente conoce a Santa Sofía de la Piedad
gracias a ella), Aureliano José, Aureliano Segundo, Fernanda del Caprio, Meme y
Aureliano Babilonia. Vive hasta los ciento cuarenta y cinco años y durante la
vejez es la matrona de un extraño burdel donde hay incluso animales
llamado el Niño de Oro, descubierto por Aureliano y sus amigos poco
antes del fin del pueblo. Pilar muere el día del nacimiento del último
Aureliano y es enterrada simplemente en una hamaca, porque pidió no ser
sepultada en un ataúd.
-Pietro
Crespi. Galán,
caballeroso y sensible. Hermano de Bruno Crespi. Pietro es el
profesor de pianola y danza contratado por Úrsula cuando la casa de los Buendía
es renovada por primera vez, durante la dulce adolescencia de Amaranta y
Rebeca. Las dos chicas pronto se enamoran de él, pero él sólo ama a Rebeca. Los
dos jóvenes empiezan a salir y Amaranta hará de todo por separarlos, desea
incluso asesinar a su hermana adoptiva. Más adelante Pietro pide la mano de
Amaranta, pero su compromiso se va aplazando constantemente por numerosas
tragedias y eventos hasta que finalmente Rebeca se cansa de él y se va a vivir
con su amante y hermano José Arcadio. Cuando Rebeca se casa con su propio
hermano, el italiano intentará cortejar a Amaranta, que siempre lo había amado,
pero ella decide rechazarlo cruelmente. Crespi termina por suicidarse
cortándose las venas de las muñecas, y ni Rebeca ni Amaranta asisten a su
funeral.
-Don
Apolinar Moscote. Es un magistrado y militar que se ocupa de
las funciones administrativas del pueblo Macondo en sus comienzos, cuando
recién empieza a ser un pueblo más o menos organizado. Llegó cuando José
Arcadio Buendía aún estaba cuerdo, con la misión de mantener a raya el pueblo y
de pintar las casas de color azul (el color de los nacionalistas), cosa que
indignó mucho a los habitantes, que se volvieron contra él. Al fracasar sus
intentos de someter al pueblo, sus soldados son expulsados, pero él es
perdonado por el fundador del pueblo y entonces el señor Moscote se queda en el
pueblo, encargándose de algunos asuntos. Don Apolinar tiene muchas hijas y
también una obvia inclinación hacia la política. Aureliano Buendía se enamora
de su hija menor, Remedios Moscote y decide casarse con ella, pero su padre le
dice que tendrá que esperar a que la hija crezca o casarse con cualquiera de
sus otras hijas. Pero Aureliano, que negó el matrimonio con cualquiera de las
demás hijas mayores, insistió tanto en la boda que finalmente, tras el primer
período menstrual de la niña, se consideró que ya estaba preparada para ser
" mujer" y se celebró la feliz boda. Antes de la muerte de la niña,
don Apolinar entabla amistad con Aureliano y ambos se reúnen varias veces a la
semana para jugar al dominó y hablar de política. Intenta sin éxito convencerlo
de que se ponga del lado de los conservadores, pero Aureliano dice ser liberal.
Poco después del fallecimiento de Remedios, su compañero de juegos se va a
combatir contra los conservadores, pero él no hace nada para impedirlo y
permanece en el pueblo. Unos meses más tarde, el señor Moscote casi es
asesinado por Arcadio, pero Úrsula regaña y amenaza a su nieto por intentar
matar al padre de su tía y le salva la vida. Entonces es también cuando termina
el imperio de Arcadio. Apolinar muere de viejo.
-Gerineldo
Márquez. Es el mejor
amigo y compañero militar del primer Aureliano Buendía, y marcha con él para ir
a enfrentarse a los conservadores. Cuando es joven, Gerineldo se enamora de
Amaranta Buendía y la visita constantemente durante sus estancias en Macondo en
algunos momentos de la guerra. Hacia el final de la guerra, Aureliano le
condena a ser fusilado por decirle que en realidad es un farsante y que no
lucha por los derechos de los liberales sino por ambición. En el último
momento, Aureliano se arrepiente de haber condenado a su amigo y ambos escapan
de Macondo para luchar en la última etapa de la guerra. Gerineldo no aprueba
las condiciones del tratado de Neerlandía, pero no hace nada para evitar que su
amigo firme el papel que pondría fin a la guerra. Al volver a Macondo
definitivamente, más gordo y viejo, vuelve a pedir matrimonio a Amaranta y de
nuevo es rechazado, pero mantienen su amistad y sigue visitándola cada día
hasta que ella termina por echarle. Años después, se niega a participar en la
nueva guerra que quiso iniciar Aureliano. Muere en la época del diluvio y su
tumba es transportada en un carro tirado por bueyes.
-Petra
Cotes. Primera
amante de los gemelos "Segundo". Cuando Aureliano II y José Arcadio
II crecen, ella permanece con el primero. Ya se ha contado mucho de esta mujer
anteriormente, por lo que no volveré a escribir las idas y venidas de su amante
y me centraré en explicar otros aspectos de esta mujer. A ella no le importa (o
no mucho) que Aureliano se case con Fernanda porque sabe que la quiere más
a ella, la que le convirtió en un hombre. Tras la muerte de su amor, le lleva a
Fernanda los zapatos que quería llevar puestos Aureliano en la tumba, pero es
ridiculizada y echada de la casa. Entonces, para humillar a Fernanda cuando se
está volviendo una mujer pobre y desamparada, es muy caritativa con ella y le
presta dinero y comida sabiendo que heriría su orgullo, pero a esas alturas a
Fernanda ya no le importaba eso.
Y por
último, os dejo alguna selección de las mejores frases, diálogos y fragmentos de la novela (sí, sacadas directamente de WikiQuote, no me he molestado en escribirlas yo). También publicaré un enlace que lleva a un documental en el que Gabriel García Márquez habla de su obra. Espero que
hayáis disfrutado leyendo esto.
-«Muchos años
después, frente al pelotón de fusilamiento, el coronel Aureliano Buendía había
de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo».
(Primera frase de la novela)
-"Todavía
no tenemos un muerto -dijo él-. Uno no es de ninguna parte mientras no tenga un
muerto bajo la tierra." (-José Arcadio Buendía)
-«El coronel
Aureliano Buendía entendió, que la vejez, no es mas que un pacto honrado con la
soledad».
-«-Compadre,
recuerda que a usted no lo fusilo yo, lo fusila la revolución.
- Con todo respeto, vaya a
comer mierda». (conversación entre el coronel Aureliano y Moncata)
-«En cualquier
lugar que estuvieran, recordaran siempre que el pasado era mentira, que la
memoria no tenía caminos de regreso, que toda primavera antigua era
irrecuperable, y que el amor más desatinado y tenaz era de todos modos una
verdad efímera».
-«Apártense
vacas que la vida es corta». (frase favorita de Aureliano Segundo)
-«En realidad,
Remedios, la bella, no era un ser de este mundo. Hasta muy avanzada la
pubertad, Santa Sofía de la Piedad tuvo que bañarla y ponerle la ropa, y aun
cuando pudo valerse por sí misma había que vigilarla para que no pintara
animalitos en las paredes con una varita embadurnada de su propia caca. Llegó a
los veinte años sin aprender a leer y escribir, sin servirse de los cubiertos
en la mesa, paseándose desnuda por la casa, porque su naturaleza se resistía a
cualquier clase de convencionalismos».
- «Llegó a la conclusión que que aquel hijo por quien ella habría dado la
vida era, simplemente, un hombre incapacitado para el amor. Una noche, cuando
lo tenía en el vientre, lo oyó llorar. Fue un lamento tan definido, que Jose
Arcadio Buendía despertó a su lado y se alegró con la idea de que el niño iba a
ser ventrílocuo. Otras personas pronosticaron que sería adivino. Ella, en
cambio, se estremeció con la certidumbre de que aquel bramido profundo era un
primer indicio de la temible cola de chancho. Pero la lucidez de la decrepitud
le permitió ver, y así lo repitió muchas veces, que el llanto de los niños en
el vientre de la madre no es augurio de ventriloquia ni facultad adivinatoria,
sino una señal inequívoca de incapacidad para el amor». (Pensamiento de Úrsula
sobre Aureliano)
- «Esta es de las que confunden el culo con las temporas.» (Amaranta sobre
Fernanda)
- No seas ingenuo Crespi, ni muerta me casaría contigo. (Amaranta)
- Siguió expuesto al sol y a la lluvia, como si las sogas fueran
innecesarias, porque un dominio superior a cualquier atadura visible lo
mantenía amarrado al tronco del castaño.
- ..porque la soledad le había seleccionado los recuerdos, y había incinerado
los entorpecedores montones de basura nostálgica que la vida había acumulado en
su corazón, y había purificado, magnificado y eternizado los otros, los más
amargos.
- Era una tortura inútil, porque ya
para esa época el tenía temor de todo lo que lo rodeaba, y estaba preparado
para asustarse de todo lo que encontrara en la vida: las mujeres de la calle,
que echaban a perder la sangre; las mujeres de la casa , que parían hijos con
cola de puerco; las armas de fuego, que con solo tocarlas condenaban a veinte
años de guerra; las empresas desacertadas, que solo conducían al desencanto y
la locura, y todo, en fin, todo cuanto dios había creado con su infinita
bondad,y que el diablo había pervertido
- Empezaron a amarse a 500 metros de altura, en el aire dominical de las
landas, y más se sentían compenetrados, mientras más minúsculos iban haciéndose
los seres de la tierra.
- «Una noche le preguntó al coronel Gerineldo Márquez:
-Dime una cosa, compadre: ¿por
qué estás peleando?
-Por qué ha de ser, compadre
contestó el coronel Genireldo Márquez-: por el gran partido liberal.
-Dichoso tú que lo sabes, contestó él-. Yo, por mi parte, apenas ahora me doy cuenta que estoy peleando
por orgullo.
-Eso es malo -dijo el coronel
Gerineldo Márquez.
Al coronel Aureliano Buendía
le divirtió su alarma. «Naturalmente -dijo-. Pero en todo caso, es mejor eso,
que no saber por qué se pelea.» Lo miró a los ojos, y agregó sonriendo:
-O que pelear como tú por algo
que no significa nada para nadie.»
Este es uno de mis fragmentos favoritos de la novela:
Cuando el pirata Francis Drake asaltó a Riohacha, en el siglo XVI, la bisabuela de Úrsula Iguarán se asustó tanto con el toque de rebato y el estampido de los cañones, que perdió el control de los nervios y se sentó en un fogón encendido. Las quemaduras la dejaron convertida en una esposa inútil para toda la vida. No podía sentarse sino de medio lado, acomodada en cojines, y algo extraño debió quedarle en el modo de andar, porque nunca volvió a caminar en público. Renunció a toda clase de hábitos sociales obsesionada por la idea de que su cuerpo despedía un olor a chamusquina. El alba la sorprendía en el patio sin atreverse a dormir, porque soñaba que los ingleses con sus feroces perros de asalto se metían por la ventana del dormitorio y la sometían a vergonzosos tormentos con hierros al rojo vivo. Su marido, un comerciante aragonés con quien tenía dos hijos, se gastó media tienda en medicinas y entretenimientos buscando la manera de aliviar sus terrores. Por último liquidó el negocio y llevó la familia a vivir lejos del mar, en una ranchería de indios pacíficos situada en las estribaciones de la sierra, donde le construyó a su mujer un dormitorio sin ventanas para que no tuvieran por donde entrar los piratas de sus pesadillas.
DOCUMENTAL:
https://www.youtube.com/watch?v=yGG5KNjMgow
ANÉCDOTA DE "CIEN AÑOS DE SOLEDAD" CONTADA POR
GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ
https://www.youtube.com/watch?v=BWKQxvf3hgw
No hay comentarios:
Publicar un comentario